El desafío:
La sala de descanso para empleados en la fábrica de plafones de Armstrong en Macon, GA, está ubicada en el centro del área de fabricación de la planta y los empleados, así como los contratistas y visitantes, la utilizan mucho a lo largo de tres turnos al día. Sin embargo, según John Wharton, director de ingeniería y proyectos de capital de la planta, el espacio de 1,000 pies cuadrados exhibía ya el paso de los años y necesitaba una reparación importante. “Realmente requería atención”, afirma. “Además, la empresa acababa de comenzar una ‘Iniciativa de espacios saludables’ que incluía mejoras en la calidad del aire interior”.
La solución:
“Como compañía, tenemos un compromiso con la construcción de espacios mejorados y más saludables para todos, y esto incluye a nuestros empleados, por lo que decidimos comenzar de nuevo en lugar de solo hacer mejoras superficiales”, continúa. “En consecuencia, se desmanteló el espacio por completo, incluido el cielo raso, los muros y el piso. Queríamos partir con un espacio de cero”.
La calidad del aire interior fue un elemento clave en la creación de un espacio saludable. Para garantizar ese aspecto, los plafones existentes se reemplazaron con plafones ULTIMA HEALTH ZONE AIRASSURE de Armstrong. Las orillas de los plafones AIRASSURE cuentan con juntas de fábrica, de modo que al colocar los plafones en un sistema de suspensión estándar, forman un sello hermético y reducen el paso del aire a través del cielo raso hasta cuatro veces más que los plafones sin el desempeño de AIRASSURE.
Para mejorar aún más la calidad del aire, también se presurizó la sala. Antes de la renovación, la sala tenía una presión negativa de -0.015 WC (columna de agua), por lo que el aire y las partículas, como el polvo proveniente de la planta de fabricación, ingresaban a la sala a través de grietas y de las aberturas en las puertas. Después de la renovación, la presurización obtenida varía entre +0.014 y +0.021 WC de presión positiva.
La presión positiva mantiene el aire y el polvo de la planta de fabricación fuera de la sala de descanso. El material particulado en la sala se redujo de los 28 microgramos/metro cúbico medidos antes de la renovación a tan solo 5 microgramos/metro cúbico. Esta es una disminución del 82% que da como resultado que la calificación general de la calidad del aire interior (IAQ) pase de ser “regular” a “excelente”, según las normas más recientes de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés). En comparación con un cielo raso sin juntas, los plafones AIRASSURE permitieron alcanzar la presurización incluso con un 83% menos de potencia de ventilación. Además, se logró que ingrese un 40% más de aire exterior en la edificación. El flujo de aire va ahora de la sala de descanso hacia la planta de fabricación, lo que da como resultado un área de descanso limpia, cómoda y bien ventilada para el personal de producción.
Wharton informa que la reacción de los empleados a la renovación de la sala de descanso “no pudo haber sido mejor. La Iniciativa de espacios saludables fue uno de los mayores compromisos asumidos para este espacio y la mayoría de las personas experimentó los resultados”, señala. “Los empleados se sienten seguros de poder respirar aire limpio y saludable gracias a la combinación de la presurización en la sala con los plafones AirAssure”.
Proyecto: Fábrica de Armstrong Ceilings, sala de descanso para empleados
Ubicación: Macon, Georgia
Productos: ULTIMA HEALTH ZONE AIRASSURE