El desafío:
La excelente cocina india del restaurante Nirmal’s en Seattle ha recibido numerosos elogios de los medios de comunicación locales y nacionales. Clasificado constantemente como el mejor restaurante indio en Seattle por la revista Seattle Magazine y como uno de los más populares del país por Zagat's, no hay límite para los elogios que recibe el restaurante por su enfoque imaginativo de la cocina india.
Con su plafón expuesto, muros de ladrillo natural y pisos de madera, el restaurante, que está ubicado en un edificio histórico construido en 1891, tiene un ambiente que refleja una época pasada. Si bien la excelente comida y el encanto del viejo mundo han hecho que los clientes regresen por más, a menudo se quejaban de que el restaurante era demasiado ruidoso. “Fue realmente un problema”, comenta el propietario Oliver Bangera. “Debido a que es comida de primer nivel, los clientes son un poco mayores. La gente viene de traje. Se visten de manera elegante para venir al restaurante y luego tienen que gritar”.
Con la esperanza de reducir el ruido, Bangera se acercó a Armstrong Ceilings para encontrar una solución que controlaría la acústica en el espacio de 1,515 pies cuadrados al mismo tiempo que preservara el ambiente del diseño de la estructura expuesta.
La solución:
Con nada más que superficies reflectantes, Armstrong recomendó que se fijasen 30 plafones acústicos FELTWORKS de una pulgada de espesor directamente en el plafón expuesto de 25 pies de altura para capturar el sonido reverberante del bullicioso restaurante. Los cálculos sugirieron que este material reduciría el tiempo de reverberación en un 76% para llevar el entorno a un nivel más cómodo. Los plafones de fieltro de 48" × 96" tienen un NRC de 0.85, lo que significa que absorben el 85% del sonido que llega a ellos.
Tras la instalación de los plafones FELTWORKS, hubo una mejora notable en la acústica en el concurrido restaurante, y los clientes comentaron que era mucho más fácil mantener una conversación. “El nivel de ruido ha bajado muchísimo”, comenta Bangera. “Todavía hay ruido. No es demasiado silencioso. Es solo que ahora la gente puede hablar”.
Fijados por imanes a una canaleta de acarreo, los plafones se instalaron rápida y fácilmente, lo que permitió al contratista del plafón finalizar la instalación en tres días. “A los instaladores les gustaron mucho los imanes”, explica Michael Grace de Acoustical Design Inc. “Los imanes se atornillan en la parte posterior de los plafones y se adhieren directamente a la canaleta de acarreo, lo que facilita el cambio o ajuste de los plafones una vez que están ubicados arriba”.
Ya que la instalación tuvo lugar temprano en la mañana antes de la apertura del restaurante, las mejoras acústicas se lograron rápidamente y sin ninguna interrupción de la actividad comercial del negocio. “Lo más importante para nosotros fue que el restaurante permaneciera abierto”, comenta Bangera. “Por lo que esto logró resultados perfectos”.